Los niños más pequeños parecen ser relativamente resistentes a los traumatismos de la columna vertebral y, aunque tienen menos posibilidad de sufrir lesiones de la columna vertebral y de la médula espinal, presentan una alta incidencia de lesiones neurológicas, junto con una alta frecuencia de lesión medular sin anormalidad radiológica y de
lesiones en la columna cervical alta, entre el occipital y C2. Las lesiones son, sobre todo ligamentosas y se producen por fuerzas violentas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario