A pesar de que en numerosas publicaciones
se agrupan estas fracturas con las
cervicales tienen peculiaridades anatómicas
y biomecánicas que justifican desarrollar su
tratamiento independientemente.
I. NO DESPLAZADAS: Se ha recomendado
inmovilizarlas mediante yeso
pelvi-pédico o mediante tracción seguida de
yeso pelvi-pédico.
En estas fracturas se recomienda un control
radiológico estricto para detectar los
desplazamientos secundarios precozmente.
II. DESPLAZADAS: Representan el
60% de estas fracturas. De forma generalizada
se ha propuesto la reducción cerrada
inicial, o abierta a través de un abordaje de
Watson-Jones si la primera no es posible.
Siguiendo a la reducción se ha utilizado
la inmovilización en yeso pelvi-pédico, la
tracción o la síntesis con tornillos canulados
sin pasar la fisis. Teniendo en cuenta que
estas fracturas en muchas ocasiones afectan
al trocánter mayor, se recomienda la reducción
y síntesis trocantérica con tornillos y
cerclajes. Siguiendo a la síntesis de la fractura
se colocará un yeso pelvi-pédico de seis
a diez semanas y se dejará la articulación en
descarga prolongada. (Fig. 6).
No hay comentarios:
Publicar un comentario